¿Tienes muchas cosas? Entonces probablemente tienes mucho estrés también
¿Alguna vez te ha pasado que entras a una habitación de tu casa y lo primero que ves son cosas fuera de lugar? Ropa sobre una silla, juguetes regados, objetos que no tienen un espacio fijo... Y de repente, sientes un pequeño nudo en el pecho, una sensación de desorden no solo en el hogar, sino también en tu mente.
Tener muchas cosas —especialmente cuando no tienen un lugar asignado— genera más que desorganización: trae estrés, ansiedad y hasta frustración. Visualmente, el desorden puede sobreestimular nuestros sentidos y recordarnos tareas pendientes, lo que nos impide descansar verdaderamente en nuestro propio hogar.
Sabemos que a veces comenzamos a organizar, con buenas intenciones, pero nos cansamos o nos distraemos con cosas que parecen más emocionantes. Y así, el desorden sigue ahí… esperando.
Quiero contarte algo que hice y que tal vez te inspire: hace un tiempo realicé un reto minimalista de 30 días para liberar el hogar (también conocido como "The Minimalism Game", creado por Joshua Fields Millburn y Ryan Nicodemus). Cada día tenía un número de objetos para donar, descartar o regalar según el número del día. Por ejemplo, el día 1 sacas 1 objeto; el día 10, sacas 10. Al final del mes, habías liberado 465 cosas.
El impacto fue increíble. No solo despejé gavetas, esquinas y armarios… despejé también mi mente. El hogar se sentía más ligero. Con menos cosas, era más fácil mantener la limpieza, más fácil encontrar lo que sí necesitaba, y más fácil sentir paz.
Este tipo de ejercicio no es solo organización: es autocuidado.
Y si necesitas ayuda con la limpieza y el mantenimiento de tu hogar durante ese proceso, en Limpio Hogar estamos para ayudarte. Nos encanta ver cómo nuestros servicios no solo limpian espacios, sino que también alivian cargas emocionales.
¿Te animas a comenzar hoy?
Puedes empezar con solo un objeto. Y si quieres una casa más libre, más ordenada y más tuya, cuenta con nosotros.
Xiomara Bracero - Tu aliada en la limpieza y salud mental